sábado, 21 de marzo de 2015

ASTENIA PRIMAVERAL

Hola Bellezas!

Por fin ha llegado la primavera!




Los días son más largos, se producen cambios bruscos en la temperatura, cambian los niveles de humedad en el ambiente…

¿Os afecta de algún modo este cambio de estación? Si la respuesta es afirmativa, puede que estés sufriendo Astenia primaveral.

La astenia es una sensación continua de debilidad, falta de vitalidad y cansancio tanto físico como mental, al realizar nuestra actividad diaria. Afecta más a mujeres que a hombres y es más común entre los 30 y los 50 años de edad.

Cuando llega la primavera, y debido a los cambios climáticos (aumento de temperatura, más horas de sol, variación de presión atmosférica y de la humedad…), nuestro organismo puede sufrir esta situación mientras se adapta. Esto se conoce como astenia primaveral.

Al ser un trastorno pasajero, no se considera una enfermedad y no se aconseja tomar ningún medicamento, incluyendo complejos vitamínicos, sin prescripción facultativa. Solo en caso de que se superen las dos o tres semanas, se debe acudir al médico para que evalúe los síntomas.

Así que, si padeces alguno de los siguientes síntomas, no te preocupes, puedes hacerles frente.

- Cansancio

- Irritabilidad

- Falta de apetito

- Decaimiento

- Dolor de cabeza

- Tensión arterial baja

- Tristeza sin causa aparente

- Disminución de deseo sexual

- Trastornos del sueño

¿Cómo podemos combatirlos?

Ante todo, pensar que es algo pasajero. Sabemos que no es una enfermedad y que, por tanto, debemos mantener un pensamiento positivo.

Hay que adaptar la alimentación al cambio de estación. Dejar las comidas copiosas e incluir en la dieta otras más ligeras. Aumentar el consumo de frutas y verduras y, sobre todo, mantener una buena hidratación. No debes olvidar beber agua, al menos 2 litros diarios.

Incluir en la dieta huevos, leche, pescado, cereales integrales, piña y aguacate, alimentos ricos en triptófano, aminoácido precursor de la serotonina, neurotransmisor que regula nuestro estado de ánimo.

Tomar la cantidad adecuada de hidratos de carbono (pan, arroz, pasta, azúcar), ayuda a mantener los niveles de glucosa, nutriente que el cerebro utiliza de forma preferente. Su disminución provoca, entre otras cosas, cansancio e irritabilidad.

Andar, al menos, media hora diaria. Practicar yoga o pilates. Bailar. En definitiva, practicar de forma regular, algún tipo de ejercicio, reduce los niveles de irritabilidad, tristeza, y ayuda a conciliar mejor el sueño.

El cambio horario que se produce a finales de marzo, también contribuye, en gran manera, a la aparición de este trastorno. Nuestro cuerpo tarda algún tiempo en acostumbrarse a los nuevos horarios y al aumento de horas de luz solar y, por tanto, a dormir algo menos.

En resumen, llevando una alimentación equilibrada, baja en grasas y rica en fibra, realizando ejercicio físico moderado diariamente y un buen descanso, ayudan a afrontar esta situación y a superarla más fácilmente.

Espero haberos ayudado a resolver algunas dudas,



Hasta la próxima!










5 comentarios:

  1. Nosotros comenzamos el otoño, hemisferio sur, pero tendre´en cuenta tus consejos para setiembre, besos

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  2. Muy bien explicado, este tiempo es complicado. saludos!

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  3. Me encanta!! Genial explicado.

    Te invito a que visites mi blog, a ver si te gusta :)

    Besos!
    ❤Mary❤
    Lee mi último post aquí :)

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  4. Uii a mi me suena eso jeje,este año parece que no pero si que la he sufrido, me ha encantado tu post.. un beso guapa

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  5. Uii a mi me suena eso jeje,este año parece que no pero si que la he sufrido, me ha encantado tu post.. un beso guapa

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